martes, 22 de mayo de 2012

Yo estudié en la pública


El Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, prometió en campaña electoral no tocar el estado del bienestar poniendo un especial enfasis en que no recortaría las partidas destinadas a educación y sanidad. Algo más de 100 días despues todo ha cambiado. La partida presupuestaria de educación ha disminuido un 21,9 %. Las becas disminuyeron un 11,6 por ciento, lo que supone 166 millones de euros menos.  Mientras tanto las tasas universitarias aumentan un 66%, o lo que es lo mismo, 540 euros más, de media, por alumno y año.

Castilla y León no es ajena a estos recortes y la Junta de Castilla y León se ha propuesto ser la alumna aventajada de las comunidades gobernadas por el Partido Popular. Para ello, entre otras medidas, ha eliminado la partida presupuestaria destinada a Becas Erasmus y Becas Fray Luis de León, ha prescindido de 600 interinos y a rechazado la Proposición no de Ley presentada por el Grupo Socialistas en las Cortes de Castilla y León que proponía situar la subida de tasas universitarios en el mínimo de la horquilla marcada por el Gobierno de España.

¿Hay Alternativas para no tener que aplicar recortes en Educación? Si, yo creo que si. Andalucía lo ha demostrado en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera celebrado el pasado 17 de mayo, siendo aprobado su plan de ajuste sin reducir las partidas destinadas a la educación. Debemos buscar  una racionalización y optimización profunda de los recursos, que propicien mejores niveles de eficacia y eficiencia, pero todo ello sin limar la calidad de la educación. 

La salida de la crisis no la encontraremos, en el largo plazo, recortando la educación un -21,9%, la investigación un -80% y la universidad un -63%, la salida de la crisis la encontraremos fomentando una educación publíca, gratuita y de calidad, que garantice la libertad e igualdad de oportunidades, es el único modo de asegurar un crecimiento económico solido y sostenible.



miércoles, 10 de noviembre de 2010

Acortamos distancias, acercamos personas


Este año se cumplen 25 años desde que fuera apagada por Renfe la última locomotora de vapor en España. Nuestros trenes desde entonces han cambiado mucho. En la actualidad nuestro país cuenta con el servicio ferroviario más rápido del mundo. La velocidad media del AVE español es de 221,05 km/h  por delante de países a menudo tan admirados e idolatrados como Francia, TGV 216 km/h, Reino Unido 180 km/h o Italia 172 km/h.
El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) gestiona 1229 túneles, 6371 puentes y más 17032 km de vías, de las cuales el 14% son líneas de alta velocidad.  
En 2011 España estará situada como la primera nación del mundo en número de km, más de 2200 km de vías de altas prestaciones estarán en servicio.
En 2020, al concluir el periodo de vigencia del PEIT (Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte): España dispondrá de 10.000 km de líneas de alta velocidad.
Castilla y León no es ajena a este esfuerzo inversor. En 2007 fue inaugurado el AVE Madrid-Segovia-Valladolid. 2012 será el año en el que la Alta Velocidad llegue a Palencia y León. Los proyectos de Burgos, Zamora, Asturias y Cantabria avanzan según lo previsto. Desde 2004, el Gobierno de España ha destinado más de 7.300 millones de euros a infraestructuras en Castilla y León, un 79% más que en los ocho años anteriores.
Por último destacar el ambicioso plan que el 14 de septiembre presentó Pepe Blanco. Este plan es la apuesta de futuro del tren como medio de transporte de mercancías. Doblar en 10 años el porcentaje de mercancías que son transportadas por ferrocarril es su objetivo. La construcción de terminales intermodales es una de las claves.
Con todos estos datos son con los que se puede afirmar, que sí, que el tren vuelve a estar en el centro de nuestras vidas.